CUIDAMOS NUESTRO PLANETA: ¡MANOS A LA OBRA!
REALIZACIÓN DE OBJETOS ÚTILES Y DE ADORNO CON MOTIVOS DE ANIMALES, CON MATERIALES REUTILIZABLES.
Héroes de la naturaleza Autor: Valentín Nahuel Schofrin
Había una vez un niño y una niña llamados Diego y Lola, que habían aprendido que debían cuidar a los animales en peligro de extinción, como el yaguareté y el oso panda. Un día, fueron a la casa de Diego a buscar información sobre cómo ayudar a las distintas especies y encontraron esto:
1- Proteger los hábitats existentes y restablecer los que se hayan perdido para fomentar la proliferación y el regreso de especies nativas.
2- No comprar productos elaborados de animales en peligro de extinción o de plantas amenazadas y animales amenazados.
3- Reciclar los productos para ayudar a reducir la contaminación.
Había un chico que se llamaba Jorge, al que no le gustaba la idea de ayudar a los animales. Jorge estaba a punto de romperles la hoja, pero Diego se la dio antes a la “Seño” y se la leyó a la clase.
Al salir de la escuela, Diego y Lola fueron a sus casas y les contaron a sus mamás lo que había pasado en la escuela. También les contaron que estaba mal la tala de árboles y que querían ir de vacaciones al lago Nahuel Huapi, y las mamás dijeron que sí.
Al día siguiente, Jorge llevó a la escuela una alfombra de piel de yaguareté. La maestra le dijo que estaba mal matar animales en extinción y además le hizo una pregunta: —¿A ti te gustaría estar en peligro de extinción y que se extinga tu especie? —Esto hizo reflexionar a Jorge; entonces lo pensó mejor.
Finalmente, llegó el día de irse al lago Nahuel Huapi y allí estaba Jorge talando árboles. Entonces Lola le dijo: —¡No lo hagas! ¡Vas a causar un incendio forestal y vas a matar muchas especies! Pero a Jorge no le importó.
Por la noche Lola le dijo a Diego que estaba oliendo a quemado. Salieron y vieron que había un incendio. Corrieron hasta el lago, cogieron agua y cuando el fuego estuvo a punto de quemar la carpa, Diego le tiró el agua y extinguió el fuego.
Luego vieron un yaguareté y un oso panda que estaban a punto de incendiarse, pero Diego salvó al yaguareté y Lola, al panda.
A la mañana siguiente se levantaron y le dijeron a Jorge que los había puesto en peligro a ellos y a los animales. Jorge se dio cuenta de lo que había ocasionado, se disculpó y volvieron a ser amigos.
FIN
El Sol, la Tierra y la ecología Autora: Violeta Méndez
¡Hola! Soy el Sol. Hoy les voy a contar la historia del planeta Tierra. Mejor comienzo: Ahí estaba yo, en el espacio, charlando con todos los planetas. No, perdón, faltaba uno y no era ni Venus, ni Marte, ni Saturno. Era la Tierra. Bueno, les dije a los demás planetas que tenía que ir a hablar un segundo con la Tierra y que ya volvía.
Me acerqué y le pregunté: —¿Por qué estás llorando?
Me respondió: —Estoy llorando porque nadie me quiere.
Yo le dije que sí la quería y que los demás planetas también.
—Yo también os quiero, pero me refería a lo humanos. Ellos no me quieren porque me ensucian y me contaminan.
—¡Ah, ahora entiendo por qué llorás! La verdad es que es triste que te contaminen y ensucien. ¿Por qué no les dices que no te contaminen más y que lo que, de verdad, pueden hacer es REDUCIR, REUTILIZAR Y RECICLAR?
La Tierra me dijo: —Nunca he hablado con los humanos porque no se me ocurría ninguna solución para ofrecerles, pero ahora me diste una.
—Y bueno, ya sabes qué decirles. Seguramente te van a escuchar y a prestar atención, porque también les puedes aclarar que si no “reducen, reutilizan ni reciclan”, toda la contaminación que hay les puede traer enfermedades. Mira el caso del Riachuelo. La gente que vive cerca de allí sufre enfermedades por tanta basura y agua contaminada.
—¡Gracias, Sol, ahora me siento mejor por saber que hay una solución para la contaminación! —me dijo la Tierra.
—No, de nada. Si quieres, les podemos hablar juntos sobre la ecología.
—¡¡Sí!! Eso me encantaría. ¿Qué tal si les preguntamos a los otros planetas si quieren ayudarnos?
—Sí, Tierra, ¡esa es una muy buena idea! Ahora vete a contarles a los planetas tu problema y tu solución. Yo ya voy.
Y así termina nuestra historia. Ya sabemos que “reducir, reutilizar y reciclar” es lo mejor para el planeta y para el ambiente. Bueno, y no olvidéis REGALAR. ¡Hasta la próxima!